CULTURA

Corto realizado por Pablo Llorens para SETEM Comunitat Valenciana.
El dilema entre "Homo consumus" y "Homo responsabilus" analizado por el Prof. Setemius desde su programa "Grandes Documentales Marcianos".
¡¡¡No seas Homo consumus!!! ¡¡¡Evoluciona!!! 





 Tomado de: http://www.todacolombia.com













LA LENGUA MUISCA, LA LENGUA DE BOGOTÁ

"Esta es la página del grupo estudiantil de trabajo Muyskkubun, proyecto mantenido y actualizado por estudiantes de Antropología y Lingüística de la Universidad Nacional de Colombia. Las principales metas del proyecto son: La trascripción de las fuentes primarias de la lengua Muisca, la realización de un Diccionario muisca-español y la recolección y registro de Muisquismos y duitismos. Si deseas contactarnos o hacer una donación al proyecto, escríbenos a"

Si queremos identificarnos como verdaderos Colombianos debemos conocer y amar nuestras raíces.






DICCIONARIO DE LA LENGUA MUISCA




Los españoles encontraron en América numerosas etnias que hablaban sus propias lenguas.  Los misioneros estudiaron y codificaron algunas a fin de comunicarse con los indígenas y adoctrinarlos en la fe católica. El siguiente resumen de un «Indice» de la lengua muisca, aunque elaborado en el siglo XIX, recoge el vocabulario que hablaban los nativos desde tiempos muy remotos.

(1834)

El diccionario se toma textualmente, por eso de algunos errores de ortografía.

VOCABULARIO

A
Alalau  =  que frio tengo.
Ancara  =  el mate o pozo.
Achacau  =  que dolor tengo.
golpe dado(tachado)
Atatau  =  que suciedad, que porqueria.
Alcanchar  =  llebar a otro a las ancas.
Achoechas  =  Lo mismo que cayguas.
Ayrampo  =  Simiente que remojada produce el color morado.
Acullico  =  El poco de coca que se conserva algun tiempo a un lado de la boca.
Accocayado  =  El comestible, que de muy podrido cria pelusa verde.
Anca  =  El mais tostado.
[...]
B
Buruca= Enrredo, mala fe.
Bajeando= se dise del vapor que dispide el agua quando esta hirviendo.

C
Chapa= Basija de barro para labarse la cara.
Cuja= Lo mismo que catre.
Chirguar= Esprimir.
Collichir= Conservar el fuero dentro la cenisa.
Cachachi= Mescla de alfalfa con ojas de abas, para las bestias.
Charango= Guitarra pequeña.
Cuchi= El puerco, o cochino.
Chia= Liendre o guebara de piojo.
Ccaucao= Huebera de pescado.
Curca= El que tiene las manos y pies puercos.
Ccasca= El que tiene la cara picada de viruelas.
Camata= se dise al yndio por apodo.
Camachicado= El que esta con sa () 
[...]
Chec_che= La chicha que recien esta fermentando.
Ccopa= La paja manuda que lebanta el ayre.
Ccosi= ojos asules
chocñi= ojos legañosos.
Ccalato= El que está en cueros.
Chuychos= Camarones de los pequeños.
[...]
D
Deschascar= desenrredar el cabello.
Durana= Espina larga con un ganchito en cada estremo de ella, para tejer medias.
Deshuaccachado= mal aliñado.
Deschascador= Peyne gordo de escarmenar.

E
Embrocar= Lo mismo que volcar una basija.
estantino= El ano.
Empeloto= El que esta en cueros.

G
Guiñapo= mais crecido, que sirve para hacer chicha.
Guacacara= Excremento de la baca.
Gandido= Apodo al hambriento.
Guisque= El que tiene la cara o vestido puercos.
Guasca= Soga de lana.
Guagua= Criatura pequeña.
Guactapa= El emboltorio que se pone sobre alguna carga.
Guinco= Mate, ó poto.
Gateras= Las que venden recado en la plasa.
Gualali 
Guarguero=
[...]
H
Huirqui= Lo que esta encojido o arrugado.
Huayquear= Aunarse, ó confabularse muchos contra uno.
Huiros= Las cañas dulces del mais.
Huacali= Sombrero rotoso.
Caida la falda por algun lado.
Huaroilla= Hablador.

Y
yro= Guiso de sopallo.
Ychay= Cambio de alg(tachado) Cierta numero de agies, con que se cambia alguna verdura en la plasa.
Ysanga= Canasto largo en figura de piramide para pescar camarones.
Yunguillo= Espesie de sapallo chico.
Yanaguagua= Criatura negra.
Yspaipiti= Mal de orina.

J
Jurgunero= Palo para atisar la candela.
Jau= Llamar, ó desir a alguno que se acerque.
Jedeque= Lo mismo que delicado, presuntuoso.

L
Locto= El huebo podrido.
Lapo= Bofetada. Cachetada.
Lambusco= Hambriento.
Lliccha= Lo mismo que Yuyos.
Lisiar= Bufonear.
Lanzaco= El que se viste de diablo.
Linlicha= la ramera, ó chuchumeca.
Loncco= Lo que está sin filo, como el cuchillo, la espada etc.

LL
Llaclla= Lebantarse el pellejo de alguna parte del cuerpo, de resultas de alguna contusion.
Lloclla= Avenida de agua en el Rio.
Llectisca
Llusca= Alguna losa, ó piedra suave, resbaladisa.
Lluchusca= El que tiene las medias caidas.
Llancar= Meter los dedos a los ojos.
Llunquido= El que está bien peinado.
Lliclla= Manta, o mantilla de las yndias.
Llullucha= Yerba del mar.

M
Mecco= El asiento que deja la chicha antes de fermentar.
Molletillo= Arina gruesa que deja la arina floreada.
Mallumia= Una caspa en las manos.
Manoso= El martagon ó el que en trampa o dilata hacer alguna obra.
Manquina= Engaño.
Morocho= El hombre fuerte, bien agarrado.
Macta= Espresion que se dise por apodo a los yndios, y cholos.
Misquirichir= Roer los huesos.
Mingar= Suplicar a otro le ayude a trabajar.
Moroco= El alguacil que conduce a los presos.
[...]
N
Nuto= Lo que está bien molido
Ñuñupa= El escremento de los niños de pecho que estan enfermos y de poner verde.

O
Ocollo= Un pescadito chico, como la carachita.
Ocoti= El sieso que se le sale a los muchachos.
Occo= Nombre de un callejon.
Occopa= Picante de camarones crudos.

P
Pallapar= Rebuscar en la chacra lo que haya quedado de la cosecha.
Puputi= El ombligo.
Partichay= Cambio de verduras con cierto numero de ajies, menor que el del ichay.
Polloca=
Puruña= Basenica de barro.
Pacuy=
Pusca= Rueca para hilar.
Puspu= Abas tostadas, y despues sancochadas.
Polcos= Tejido de lana, en forma de sapatos para las criaturas.
Pachuela= Un jarro de barro que sirve de medida para vender la chicha.

Q
Quirco= Laso, o tira de pellejo seco.
Qquepichar= Envolverse, ó taparse el cuerpo.
Qquencha= El hombre desafortunado.
Quijo= Juego de frijoles que quando topa el del compañero con el del otro se llama asi.
Quecho=
Quino= La puñada que da uno e otro en la cara= Tambien el aujero que hase con  trompo e otro en el juego de muchachos.
Quechincha= El ollin que se cria en las cosinas(tachado) paredes de la cosina o en la chiminea
Qqueriri= Tumor que sale en la yngle o sobaco.
Qquequechali= El muchacho que hace uno deposicion suelta.
Qquecolis
Quiminducha= La alcahueta.
Qquepiña= Una manta en cuadro de que usan los albañiles para cargar tierra.

R
Rurana= Espina larga con un ganchito en los estremos para tejer medias.
Rochino= Le dise del peso, u otra moneda gastada y mohosa.
Retaco= El hombre chico.
respingo= El corcobo de la mula o borrico.
Remilgado=
Resongar=
Rocoto= Pimiento grande muy picante.

S
Suysuna= Colador de servir la chicha.
Seqque= El agua con que se laban los cantaros de la chicha.
Sacanche= El bagaso de mais, ó guiñapo de la chicha.
Soroto= Se dise del demente, sonso ó que le falta algun sentido.
Sogsona= La que trae la saya mal puesta y tiesa.
Simbas= las trensas del cabello.
Singar= pelar con los dientes las cañas dulces.
Sancajo
Sancayos= unos pepinitos que producen los espinos de los serros.
Seqquerna 

T
Tocta= Se dise de la gallina que está empollando.
Tiesto= pedaso de callana.
Tincar= Jugar con frijoles los muchachos.
Timpusca= Guiso de papas, con sesina y coles.
Tacpi= El que tiene algun pie torcido.
Toncori=
Tacho= Porongo pequeño de barro para calentar agua.
Tinquir= Juntar una olla con otra para cosinar en un fogon.
Tolocchi
Tocpina= Palo para atisar la candela.
LA SABIDURÍA DE LOS PUEBLOS INDIGENAS




A.G.N., Sección Colecciones, Enrique Ortega Ricaurte, Caja 9, Carpeta 30, Folios 7-51

Esta es la unica escuela publica en colombia que enseña la lengua muisca, nativa de la region de cundinamarca y boyaca, es una lengua mas antigua que el arameo, lenguaje judio y recuperado despues de siglos de haberlo perdido, si queremos tener identidad cultural y nacional es nuestro deber conocer nuestras propias raices.

Encuentros cercanos
Por Gloria Helena Rey
BOGOTÁ, nov (IPS) - La utilización de la hoja sagrada de la coca, el respeto por el agua y la naturaleza y otras prácticas de la milenaria cultura chibcha o muisca, tan importante como la inca, maya y azteca, sobreviven en Colombia, pese a la agresión de siglos.
"Muchas tradiciones y costumbres chibchas fueron satanizadas por los españoles y por otros pueblos, y por eso se buscó olvidarlas", explica a IPS el escritor Antonio Cruz Cárdenas.

"Sin embargo, la cultura chibcha no ha dejado de existir. Empezamos a demostrar que los ignorantes no fuimos nosotros", dice a IPS el físico y biólogo indígena Alfonso Fonseca, gobernador del Cabildo chibcha del municipio de Cota, situado a una distancia de media hora por carretera al norte de Bogotá.

Al igual que "los mayas-aztecas de México, de los incas del Perú y de los aymaras de Bolivia, los muiscas de la época del descubrimiento habían sobrepasado la civilización primitiva" y obedecían a caciques, se afirma en "Culturas indígenas colombianas", de Rafael Martín y José Puentes.

La cultura muisca era la más avanzada de las civilizaciones precolombinas, según el indigenista Miguel Triana en su libro "La civilización chibcha", de 1921.

Hoy subsiste en los departamentos centrales de Cundinamarca, cuya capital es Bogotá, y Boyacá, donde floreció con fuerza por lo menos desde el siglo VII antes de Cristo.

En Cota, IPS visitó "Jizcamox", única escuela pública de Colombia donde se enseña el muisca, una lengua más antigua que el arameo, según estudios de la investigadora Mariana Escribano.

Pacíficos, organizados y agricultores, los muiscas hablaban un idioma descendiente de la familia lingüística chibcha, procedente de América Central.

Esa lengua se extendió y dividió en varios dialectos en Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá y en algunas regiones de Colombia, Venezuela y Ecuador, de acuerdo con "Estudio indígena colombiano", de Teresa Arango.

Actualmente pocos colombianos hablan muisca pues el uso de dialectos nativos fue prohibido en 1770 por una cédula real en favor del español por razones sociales, religiosas, económicas y políticas.

En Jizcamox, que significa "medicina de la mano", se enseña muisca a 150 niños, de apellidos como Tibaquichá, Bocarejo, Balsero o Fiquitiva, descendientes directos de los muiscas.

"Los niños cursan una primaria tradicional, pero tienen énfasis en la lengua y tradiciones de sus antepasados", comenta a IPS María Yolanda Esquivel, directora de la escuela. Con "chisué" (buenos días) y "anaxié" (hasta luego), saludan a coro los estudiantes.

En Cundinamarca y Boyacá aún se practican tradiciones muiscas. El Abuelo Fernando, por ejemplo, encabeza el milenario ritual de limpieza espiritual, que se realiza de noche porque permite un mejor manejo de las energías, pues "el silencio con sus fríos murmullos habla en diálogo permanente con el Sabedor", dice Ana Tiquidimas, que asistió a uno de esos ritos en 2005.

En Bogotá sobreviven, además, vocablos chibchas, como "curuba" (una fruta) "toche" (un pájaro) "guadua" (una planta similar al bambú) y "tatacoa"(un animal salvaje), entre otros, aunque muchos desconocen su origen.

Algunos bogotanos creen que son chibchas palabras como "ají" y "ajiaco", nombres de dos platos tradicionales locales, pero su origen es caribe, según investigadores.

En Bogotá es posible adquirir, en modernos centros comerciales, productos elaborados a base de la hoja de la coca, utilizada durante siglos por los muiscas, entre otras culturas indígenas, en rituales y curaciones: vino para combatir la depresión, galletas contra la fatiga o para controlar el apetito, tés energizantes y pomadas para calmar los dolores de la artritis.

También se elabora una loción analgésica y antiinflamatoria, el Cocadol, un refresco revitalizante e hidratante llamado Coca Sek y gotas florales contra la adicción al alcohol, el tabaco y la cocaína.

"La planta de coca lo cura casi todo. Los indígenas lo sabían siglos antes que los laboratorios farmacéuticos", señala a IPS el antropólogo Héctor Bernal.

La tienda "Coca indígena", de su propiedad, es la primera especializada que se abrió en Colombia y que comercializa todos los productos indígenas elaborados de la naturaleza, especialmente de ese vegetal y de la marihuana.

Hasta mediados del siglo XX, las hojas de coca se vendían en las boticas de Bogotá y otras ciudades, y las madres las utilizaban para que los niños durmieran más tranquilos.

"A mí me dieron hojas de coca con el tetero. La coca no tenía entonces la carga cultural negativa de hoy", dice la antropóloga Patricia Clavijo, de 55 años.

Los chibchas cultivaron y utilizaron la coca siglos antes del narcotráfico.

También respetaban y defendían la naturaleza, cuando no existían los ecologistas, y practicaban la medicina natural siglos antes de que ésta renaciera en el siglo XX.

Su sometimiento violento a "un régimen de explotación colonial destruyó, paulatinamente, su organización económica, social, política y cultural, que causó, a mediados del siglo XVII la catástrofe demográfica de su población", dice el investigador Luis Eduardo Wiesner en "Etnografía muisca".

"Los españoles no entendieron nada de esa civilización, y como los chibchas no eran guerreros perecieron bajo su violencia", afirma Cruz Cárdenas.

OTRAS COSTUMBRES

Descendientes directos de los chibchas residen hoy en Bogotá o en municipios cercanos como el citado Cota, Chía, Tenjo, Sesquilé, Suba, Engativá, Tocancipá, Gachancipá y Ubaté.

En Cota y Suba hay dos asentamientos chibchas. Chía significa luna y Cota es participio del verbo chibcha "cotansuca", que significa "crespo, crespa, encrespado, desgreñado", según la obra "Geografía Humana de Colombia", Región Andina Central, de la Biblioteca Luis Ángel Arango.

A los descendientes muiscas se los reconoce por sus obras. El comercio sigue siendo para ellos, como para sus antepasados, una de las principales actividades.

El maíz, la papa, la yuca y las legumbres son la base de su alimentación. Continúan comercializando la sal, el carbón y los textiles y produciendo artesanías, ricas en decoraciones de animales, hombres y seres fantásticos nacidos de su imaginación.

En el campo y en las ciudades de Cundinamarca y Boyacá subsisten, además, métodos muiscas de cultivo, que se guían por los ciclos de las lluvias o las fases de la luna.

Los campesinos tampoco necesitan hoy los pronósticos meteorológicos. El canto de la mirla es anuncio de lluvia y "el canto y el vuelo de un copetón, señal de que el agua pasará", explica a IPS Arturo Muscué, del municipio de Chía, a 20 minutos en automóvil al norte de Bogotá.

"Cuando las plantas de papa y arveja tienden a cerrar sus hojas y a señalar hacia arriba, también es presagio de lluvia", dice.

Subsiste la utilización de infinidad de "contras" o talismanes, como piedras del río o una penca de sábila (aloe), para combatir la mala suerte.

Como sus antepasados, los descendientes de los muiscas respetan los lagos, las montañas y las rocas.

"Consideran que los 'espíritus' están vinculados a los fenómenos físicos, a los ríos, las montañas y las lagunas", según "Mitos y leyendas populares de Boyacá".

Algunos campesinos boyacenses creen "que los espíritus del agua no sólo viajan bajo la tierra, sino también toman fuerza humana y caminan".

Historiadores afirman que esa supervivencia mítica tiene profundas raíces chibchas y está relacionada con mitos como el de Bachué, Bochica, Huitaca y otros.

Bachué era la madre del linaje humano, quien emergió de la laguna de Iguaque, (distante una hora por carretera al oriente de Bogotá) se casó con su hijo, pobló la tierra y regresó a la laguna convertida en serpiente, junto con su hijo. Bochica era el Dios civilizador y Huitaca, la diosa rebelde.

"Por eso los chibchas fueron adoradores del agua, en un mito que se transmitió a los campesinos de Cundinamarca y Boyacá", comenta Cruz Cárdenas.

NO FUERON COMO EL TIGRE

Los chibchas habitaban las regiones centrales de Colombia. Al comenzar la conquista, en el siglo XVI, la cultura "estaba organizada en cacicazgos confederados", según la Geografía Humana de Colombia.

"El cacicazgo muisca de Bogotá, presidido por el Zipa (gran cacique), era el más importante de los cinco existentes", según Cruz Cárdenas.

El territorio muisca "incluyó valles interandinos, mesetas y laderas condicionadas por diferencias altimétricas, con diversas temperaturas, humedad y precipitación", de acuerdo con el historiador Álvaro Botiva en "Colombia prehispánica".

Por todo lo anterior, el filósofo español José Ortega y Gasset (1883-1955) no se equivocó al afirmar que el ser humano no es como el tigre, que cuando nace "es un primer tigre" y "tiene que empezar desde el principio su profesión de tigre".

El ser humano hereda todas "las formas de existencia, las ideas, las experiencias vitales de sus antecesores, y parte, pues, del pretérito humano acumulado bajo sus plantas", escribió en "El libro de las misiones".

Los más de ocho millones de bogotanos y restantes pueblos que viven hoy en los antiguos dominios chibchas no comenzaron como el tigre.

Cuando nacieron, el pretérito humano acumulado bajo sus plantas ya tenía una historia de miles de años.

Fotos: Gloria Helena Rey(FIN/2007)


1 comentario:

  1. La lista de probables voces de origen muisca, de Ortega Ricaurte, no se puede aceptar así, sin más, sin antes de ser sometida a un estudio riguroso, y con criterios lingüístico-genéticos. Atentos saludos, Miguel Ángel Quesada Pacheco (Bergen, Noruega).

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